Producción artística

Dos poemas

Mateo Serrichio

Plurentes. Artes y Letras

Universidad Nacional de La Plata, Argentina

ISSN: 1853-6212

Periodicidad: Anual

núm. 14, e072, 2023

revistaplurentesunlp@gmail.com



DOI: https://doi.org/10.24215/18536212e072

she comes in colours everywhere

                   she´s like a rainbow

ya son dos semanas

que llevo de reo despojado

contando día por día con los dedos

mientras el mundo entero se abalanza sobre mí

día por día entre mis dedos

esperando una canción consagratoria

una dulce palmada en la espalda

un punto y aparte en el correr de la monotonía.


dos semanas más, menos

desde que mis diurnos delirios de drama

se corrieron a otro lado

y posaron su obsesión en otro rostro

le encontraron más olor y más color

a las flores temerosas que se asoman

contando con sus pétalos los días


y entre ese olor que se mezcla triste

con las frituras y los perfumes malos

se me escapan las horas por los dedos

mordisqueados por el reo fantasmal

pienso serio, decidido

sabiendo que me miento como un idiota

que no quiero verla jamás

es más, firmemente decido ignorarla

si alguna vez en dos semanas

se cruza su cara entre el olor del tumulto.


está decidido, les digo a los dedos en mi cara

que no me escuchan intentando atrapar los minutos que se escapan

pensando en las flores y en mañana


está decidido, más o menos en dos semanas

me anuncian las flores que lloran fuertes orines desgraciados

la veré y decidiré ignorarla

a no ser que, más o menos en dos semanas

yo la vea y ya no sea invierno


y en los canteros ya no se oigan arrabales

y en el cielo no se huela la agonía

llegará la primavera en dos semanas

y las flores, la tristeza y yo

dejaremos de contar los días encerrados

y mis dedos no podrán contar

más que los lunares de su cara.



* * *


con la frente marchita en el tiempo

atino a cazar la sombra liviana

que corre veloz desprendiendo un suspiro

dejando su aroma

de lluvia de verano, de pasto recién cortado

de vida.


terrible sombra triunfante

la cazo y la invoco cada noche

y le cuento mis penas y esperanzas

le pido que espere paciente

ya estaré más armado

ya seré más humano


¡maldita sombra nocturna!

no me dice más

que palabras de cortesía

y yo que había ensayado los mil y un discursos

la atrapo con un balbuceo idiota

tan patético y derrotado


corre libre en dos minutos

y no vuelve a iluminarme su silencio

miraré su velo trasnochado un par de horas


y no dejaré de admirarte, sombra,

ni sabiendo que jamás serás mía.

Modelo de publicación sin fines de lucro para conservar la naturaleza académica y abierta de la comunicación científica
HTML generado a partir de XML-JATS4R