Revista de Relaciones Internacionales Nro. 7

 

Lecturas

"TIERRA PATRIA"

Edgar Morin - Anne Brigitte Kern

Ed. Nueva Visión, Buenos Aires, 1993, 222 Págs.

En este libro, Edgar Morin, filósofo contemporáneo y director de investigaciones emérito del Consejo Nacional de Investigaciones Científicas de Francia logra atrapar al lector haciendo una reducción maravillosa de los problemas que afectan, desde una perspectiva global, es decir planetaria, a la organización humana sobre la tierra. En sólo ocho capítulos realiza una descripción de los elementos de la organización humana actual que conforman lo que denomina la "era planetaria", analiza cuáles de ellos plantean dilemas y prepara, desde su optica, posibles respuestas que se deben dar desde el pensamiento para modificar la política internacional de dominio que ha caracterizado a la evolución humana. Concluyendo "...¿Dominar la naturaleza? El Hombre todavía es incapaz de controlar su propia naturaleza, cuya locura lo lleva a dominar la naturaleza perdiendo el dominio de sí mismo. ¿Dominar el mundo? Pero si no es más que un microbio en el cosmos gigantesco y enigmático. ¿Dominar la vida? Pero si aunque pudiera un día fabricar una bacteria, lo haría como copista, reproduciendo una organización que jamás fue capaz de imaginar. Y ¿sería capaz de crear una golondrina, un búfalo, un león marino, una orquídea? Puede masacrar bacterias por miles de millones, pero no puede impedir que las bacterias resistentes se multipliquen. Pude aniquilar los virus, pero se encuentra desarmado ante los nuevos virus que lo desprecian, se transforman, se renuevan...Aun en lo concerniente a las bacterias y los virus, debe y deberá negociar con la vida y la naturaleza..." Su visión de las dificultades que se avecinan para la especie humana no son sin embargo apocalípticas. Para Morin, la reforma del pensamiento es la clave para la restauración de los objetivos que tiene el hombre en el planeta, la misión que lo antrópico tiene en el universo: la evolución y el desarrollo de su especie. El anuncio que nos entrega es que nos hallamos en las vísperas de la lucha inicial, de una etapa nueva en la cultura y la civilización.

Este libro de fácil lectura y comprensión permite al lector conocer también la concepción filosófica que pretende religar la filosofía con la ciencia y cuyo ejemplo lo constituye el propio Edgar Morin, un filósofo que hace ciencia y un científico que hace filosofía.

Prof. Aldo Luis Servi

Facultad de Ciencias Jurídicas y Sociales

Universidad Nacional de La Plata

 

LA TERCERA OLA, LA DEMOCRATIZACION A FINALES DEL SIGLO XX
Samuel P. Huntington

Editorial Paidós, Buenos Aires, 1994, 329 págs.

Título original: "The third wave. Democratization in the late Twentieth Century"

Habiendo concluído la Guerra Fría se abre un nuevo debate en la comunidad intelectual. ¿Como será el mundo de la Post-Guerra Fría?. Desde Francis Fukuyama, con su "Fin de la Historia", pasando por Saul Bellow, Irving Kristol, y en nuestros días el trabajo de Paul Krugman sacudiéndo el mundillo de relaciones económicas internacionales con:"Peddling Prosperity" New York:W.W. Norton & Company,1994. ¿Quientiene razón en el debate a finales del siglo XX? ¿Que ideas gobernarán en las próximas décadas? El nuevo Orden Mundial con sus tensiones y conflictos desconcierta a políticos y economistas. Estos sucesos que transcurren en las puertas del tercer milenio atrae a intelectuales, académicos y a todos que de alguna forma participan de este Nuevo (Des) Orden Mundial que trae consigo un nuevo argumento para seguir el debate de la época en que vivimos.¿podrán al menos explicarla?.

Después de haber ganado notoriedad en su libro:"El Orden Político de las Sociedades en Cambio", Samuel P. Huntingtón, Profesor de Ciencias Políticas y Director del John M. Olin, Institute for Strategic Studies de la Universidad de Harvard, además de ser fundador de la publicación Foreign Policy, acaba de presentar su nuevo trabajo:"La Tercera Ola".

MARTIN A. MORGANTE

Depto. Relaciones Económicas Internacionales

Instituto de Relaciones Internacionales, UNLP

 

 

LA POLITICA EXTERIOR DEL GOBIERNO DE MENEM
Seguimiento y reflexiones al promediar su mandato
Alfredo Bologna y otros

Rosarios, CERIR, 1993

Este texto es un importante estudio y balance de la política exterior de Menem a la mitad de su gestión. Siempre es difícil hablar de cuestiones que aun se están desarrollando pero, a pesar de ello, este libro sale airoso de la partida.

Tiene un sentido reivindicativo de la disciplina frente a la proliferación de literatura no especializada sobre el tema, sobresaliendo de lo anecdótico e implantando rigor a la hora del análisis.

Es, conjuntamente al libro de Roberto Russell La Política Exterior Argentina en el Nuevo Orden Mundial, una aproximación académica al cuestionamiento de la política exterior de la actual gestión y es definido por sus autores como un "seguimiento y reflexión" sobre el mismo. Por ser un libro colectivo es difícil hacer una evaluación global del mismo aunque intentaremos seguir su articulación. Los textos allí reunidos poseen cierto criterio de homogeneidad, y representan el estado de la investigaciones hechas por algunos de los miembros del CERIR.

Es un trabajo como declaran sus autores "a medio camino entre los estudio generales de política exterior y los estudios de casos y más particularmente los estudios de procesos de toma de decisiones..." Los trabajos, en su mayoría, siguen el estilo del particular proceso de toma de decisiones del actual gobierno y el abordaje de las cuestiones en tres enfoques (político- diplomático, estratégico-militar y económico).

Posee un primer capítulo de presentación, viendo la política exterior de Menem desde el punto de vista global. Allí se describe al realismo periférico escudeano implementado por el actual gobierno

entendiéndolo como el alineamiento con EEUU, basado en "la necesidad de confrontar con las Superpotencias sólo en aquellos temas que afecten los intereses materiales del país..." Otros puntos descriptos son los efectos de la sobreactuación del Poder Ejecutivo en el ámbito internacional, como una forma condicionante del contenido de las políticas implementadas, y los cambios, ajustes y continuidades de la misma. Caracterizándola como "un punto de inflexión" y cuyo diseño seexplica, según sus autores, por "la presencia creciente de académicos; el recurso al pragmatismo y las preeminencias clave económica antes que la ideológica..."

Los artículos siguientes esbozan la problemática desde las perspectivas particulares de las relaciones con países o áreas del mundo, privilegiadas por los autores del trabajo, basándose no sólo en la importancia de la agenda, sino también en lo que ellos consideran importante.

Luego trata el tema excluyente de la política exterior, la relación con los EEUU. Creemos que este artículo es el eje deltexto como lo es de la política exterior. La autora, Anabella Busso, analiza la relación bilateral en su conjunto percibiéndola "como resultado de una realidad más compleja que el mero hecho del alineamiento irrestricto e ingenuo..." Para ella, los ejes de este punto son: el impacto psicológico en la tradicional cultura argentina con respecto a los norteamericanos -produciendo oposición tanto dentro como fuera del gobierno-; la iniciativa de este cambio proviene del gobierno argentino y no de la administración estadounidense; la capacidad de la diplomacia de aquél para influir sobre la política doméstica; y el hecho de establecer distintas estrategias de negociación en los ámbitos de subsidios, patentes medicinales, política misilística y nuclear. Rescatando como conclusión que la actual política "hacia Washington ha roto el histórico desacuerdo entre Argentina y Estados Unidos y entre el peronismo y los Estados Unidos. A mediano plazo, la construcción de confianza creada a partir de la política menemista brinda un nuevo marco para la resolución de disputas..."

Después la política del MERCOSUR se trata en tres artículos en donde cada uno analiza los tres niveles citados anteriormente. En el político-diplomático se señala que este mercado común "mantiene sus atractivos aún al atravesar un momento complejo..." Desde lo económico se sostiene en consonancia con lo anterior que la "nueva conformación mundial signada por la existencia de megamercados nos lleva inevitablemente a definir una estrategia a nivel regional..."

La relación con Europa es tratada en dos artículos el primero que trata la relación con la Comunidad Europea en su conjunto y el segundo la relación argentino-alemana.

En el primero Pedro Romero plantea las dificultades actuales para establecer una relación beneficiosa para ambos ya que carecemos de: un seguimiento "paso a paso del desarrollo del proceso comunitario"; superar la deficiencia en la cooperación política basado en algunas novedades aunque no suficientes en el ámbito económico; deficiencia de nuestro sector exportador; inseguridad jurídica y corrupción administrativa. Desde Europa nos encontramos con un desproporcionado proteccionismo económico y la falta de una política hacia América Latina frente a la prioridad de Europa Oriental y la ex URSS y los Acuerdos de Lomé con sus ex colonias. Como hecho positivo la firma del Acuerdo Marco es importante como fuente de inversiones, nuevas posibilidades para nuestras exportaciones, la apertura de una delegación de la CE en nuestro país y un acuerdo pesquero.

El segundo muestra la preocupación de nuestro país por acercarnos a Alemania, a pesar de los distintos roles cumplidos por ambos países en la Pos Guerra Fría aunque la democracia, la ampliación de mercados y la estabilidad económica permite un buen marco para las iniciativas conjuntas.

Estableciendo de esta forma los tres ejes más importantes de la Política Exterior Argentina, según lo declarado por el gobierno y repetidamente por los autores.

Luego desarrolla una importante variedad de temas: la relación con los estados de la ex URSS -quien fuera nuestro socio comercial más importante durante fines de los 70 y 80 y sus perspectivas futuras-, con el Japón -en donde se hace hincapié en la necesidad de adaptar a los "términos japoneses" nuestra política exterior y la actitudempresarial para poder producir un acercamiento a ese importante país- , con el Este Asiático -en donde si bien se ha avanzado mucho se ha descuidado la participación en la APEC frente a la prioridad del NAFTA y el MERCOSUR-, el Medio Oriente - es presentado como una región no tradicional en nuestra política exterior y los cambios ocurridos en ella durante la actual gestión-, Africa -haciendo resaltar la pérdida efectiva de importancia en nuestra percepción sobre la región y sobre todo la subsahariana, a excepción de Sudáfrica-.

Los dos últimos trabajos merecen un tratamiento más específico, son los referidos a la cuestión antártica y el conflicto con Gran Bretaña por las Islas Malvinas.

El primero de ellos, escrito por Myrian Colacrai de Trevisan, es destacado como un "leading case" de negociación permanente dentro de un régimen internacional, como lo es el sistema antártico. Los puntos para resaltar de la actual gestión son: 1) la promoción de un Centro Internacional de control y salvaguardia de la Antártida, como una universalización del problema cosa que marca un cambio en nuestra política sobre el área y la de los países firmantes del Tratado Antártico que pretenden mantenerlo en su esfera; 2) la declaración conjunta Argentino-Chilena donde ambos países se apoyan mutuamente trajo cierto malestar en otros miembros; 3) la evolución de la política antártica ha contribuido a generar espacios de consulta y decisión donde se combinan las dimensiones de relaciones externas, desempeño interno, actividades logísticas y científicas. Aunque aquí falta como señala la autora la dimensión económica tan frecuente en el discurso "y tan ausente hasta nuestros días en el marco de las acciones."

El segundo artículo escrito por Alfredo Bologna, y último del libro, es sobre la disputa por las islas Malvinas. El autor señala que el objetivo de la Cancillería es "volver a la situación previa a la guerra de 1982." Por ese motivo la actual gestión privilegia la negociación bilateral a la multilateral -a diferencia del gobierno anterior que privilegió esta última-. Los aspectos diplomáticos y militares, según lo indica su autor, "han sido resueltos... bajo la cobertura del paraguas de soberanía". En las relaciones económicas sigue siendo conflictivas la negociaciones en el ámbito de los hidrocarburos y temas pesqueros. Para seducir a los kelper, el gobierno, manifestó que tendría en cuenta sus "deseos", cambiando la postura tradicional de nuestro país que privilegia sus "intereses", aunque como forma de aproximación no ha dado los resultado esperados. La negociación bilateral ha destrabado la relación con la CE permitiendo el Acuerdo Marco, tal vez el único beneficio palpable hasta el momento.

A la hora de hacer un balance sobre este libro, creemos que debiera revisar algunas de las consideraciones teóricas que lo rigen, como por ejemplo, si en este caso el alineamiento con los Estados Unidos no es más ideológico que económico y sobre todopor las consecuencias que trae aparejada con nuestra política hacia otra áreas del mundo. Relacionado con este punto quedaría analizar el éxito efectivo -si es que lo hay- en el ámbito económico de dicha política. Otro punto es el carácter de "inflexión" de la actual gestión. Habría que ver si este concepto no es un punto más de los constantes vaivenes en nuestra relación con los EEUU y el Mundo, o si es simplemente una precisión demasiado fuerte teniendo en cuenta el famoso "giro realista" de la gestión radical, o incluso el debate académico sobre ello, ya que es sabido, existe en la historia argentina de este siglo un espíritu "refundacional" con cada cambio de gobierno.

Finalmente, cabría preguntarse si la tan mentada "sobreactuación" en el ámbito internacional no sea el rasgo más caracterizado de la gestión, incluso dejando a su pretendido realismo en un segundo plano.

PROF. ALEJANDRO SIMONOFF

Facultad de Humanidades y Ciencias de la Educación

Universidad Nacional de La Plata

 

CRITICA DE LA MODERNIDAD
Alain Touraine

Buenos Aires, Fondo de Cultura Económica, 1994, 391 páginas.

Título original: "Critique de la modernité." Paris, Librairie Arthème

Fayard, 1992.

El texto de Alain Touraine podría tener como titulo "Guía Práctica de la Modernidad". En él se transita por el largo itinerario que este movimiento político, económico y cultural, originado en la Europa de los últimos tres siglos por los menos y que acompaña su expansión planetaria en ese mismo periodo. Sus principales personajes también están presentes de Descartes a Foucault, pasando por Voltaire, Rousseau, Hegel, Tocqueville, Nietzsche, Bell, Fukuyama, entre tantos otros

En el se "trata de discernir el sentido, no sólo de ideas nuevas, sino también de prácticas de todas clases, individuales y colectivas, que manifiestan los objetivos, los conflictos y los actores de un mundo nuevo..." (362)

El libro está compuesto por una introducción y desarrollo que consta de tres partes, la primera "La modernidad triunfante" (formada por los capítulos: Las luces de la razón, El alma y el derecho Natural, El sentido de la historia), la segunda "La Modernidad en crisis" (formada por: La descomposición, La destrucción del yo, La nación, la empresa, el consumidor, Los intelectuales contra la modernidad, Salidas de la modernidad) y la última titulada el "Nacimiento del Sujeto (formado por: El sujeto, El sujeto como movimiento social, Yo no es ego, La sombra y la Luz, Qué es la democracia?) dejando como conclusión el capítulo "Puntos de Llegada" que tiene la función de cerrar (?) o mejor dicho dar precisiones del autor sobre el tema.

La idea de modernidad del autor es definida como la tensión existente entre el avance de la idea de razón con las ideas de libertad, felicidad personal y satisfacción de necesidades. Su posición es definida "como la relación...de la Razón y el sujeto, espíritu de Reforma, de la ciencia y la libertad. Se trata de una posición igualmente alejada del modernismo, hoy en decadencia, y del posmodernismo, cuya fantasma ronda por todas partes." (12)

Por otro lado señala que la modernidad "ha quebrado el mundo sagrado ...[y que]... no lo reemplazo por el mundo de la razón y la secularización... La modernidad ha reemplazado la unidad de un mundo creado por la voluntad divina, la Razón o la Historia, por la dualidad de racionalización y de la subjetivización."(12) Entendiendo este primer concepto como "racionalidad instrumental [que] es como una plataforma giratoria o eje, pero no constituye un principio que integre la modernidad."(147) El segundo, la subjetivización, es entendida como el "surgimiento del sujeto humano como libertad y creación" (205).

Estos dos conceptos pujan dentro de la Modernidad en un vacío, en "una imagen del vacío, de un poder sin centro, de una economía fluida, una sociedad de intercambios mucho más que de producción. En suma, la imagen de la sociedad moderna es la de una sociedad sin actores." (203)

Esta idea de vacío, es la profundización de la formulación lefortiana de la democracia en su carácter de indeterminación radical como "la noción de un lugar infigurable que no está ni fuera ni adentro; la noción puramente simbólica, en el sentido de que ya no se localiza en lo real... " (La invención democrática. Buenos Aires, Nueva Visión, 1990, 190) Cuando la racionalización se impone, la subjetivización corre peligro, ya que lleva a "la eliminación del sujeto" (37). Aunque como él aclara, los intentos por concebir este triunfo hasta ahora han fracasado. Esta dinámica es la que dio a la Modernidad su vigor y también las bases de su desmoronamiento, como ya lo había prescripto Marx en su famosa frase del Manifiesto Comunista: "todo lo sólido se desvanece en el aire". Frase rescatada por Marshall Berman para nosotros hoy (Todo lo sólido se desvanece en el aire. Buenos Aires, Siglo XXI, 1989).

La descomposición del mundo moderno está dada por el hecho de que la "fuerza principal de la modernidad, fuerza de apertura de un mundo que estaba cerrado y fragmentado, se agota en la medida que se intensifican los intercambios y aumenta la densidad de hombres, capitales, bienes de consumo, instrumentos de control social y armas" (93) Hoy, esta dinámica, ha perdido su fuerza de liberación llevando a dos interpretaciones una la posmoderna que afirma que la descomposición "es inevitable" y la otra modernista, por así decirlo, que sostienen que "la modernidad debe ser definida e incluso ampliada" (178)

El debate sobre la modernidad y la posmodernidad esta siempre signado por un sinnúmero de problemas. Por un lado hay que señalar, como lo hace Andreas Huyssen, que los cambios del mundo actual son de tal "...profundidad y naturaleza ... [que]... pueden ser objeto de debate, pero es preciso reconocer que se trata de una transformación." ("Guía del posmodernismo" Punto de Vista, Año X, Nro. 29, Buenos Aires, Abril-Julio 1987, iii) También que la Modernidad fue un modelo plural y que "habrá tantas formas diferentes de posmodernismos como existieron modernismos..." según la feliz expresión de Jameson (La Posmodernidad. Barcelona, Kairós, 1985, 166). Es decir la modernidad, su crisis y la posmodernidad no solo son caracterizaciones tiempo sino también de estilos.

Pero a pesar del éxito que el discurso posmoderno parece tener, creemos que no nos exime de señalar, como lo hace el autor, que: "Redefinir la modernidad no es sólo útil para las sociedades modernas o paras las sociedades en vías de modernización. Es también para los intelectuales un medio indispensable de escapar a la pérdida de sentido que los empuja a ver solamente control y represión en la civilización técnica y a negar la existencia de actores sociales en un mundo que está, sin embargo, agitado por problemas e innovaciones, por proyectos y protestas." (175)

Esta es la base de su planteo, que aparece en todo el libro. Touraine nos presenta otra alternativa, una tercera vía, lejos de los festivos posmodernos y los defensores de un mundo que ya no existe pero percibiendo a ambos lados los aspectos que dan razón del mundo actual. Esto, como muchísimas otras cosas hacen interesante esta propuesta. Incluso, para seguir desarrollando estos temas ya que nos permite reexaminar nuestra sociedad y la pasada para percibir algo más sobre nuestro futuro.

PROF. ALEJANDRO SIMONOFF

Facultad de Humanidades y Ciencias de la Educación

Universidad Nacional de La Plata